lunes, 21 de noviembre de 2011

Ternura

Como un abnegado escultor
Como oficioso escultor salgo a buscar palabras como piedras en su orden esencial
La busco para darle un talle exacto
Justo
Preciso
Para que ella nazca a punta de cincel luminosa y alta
Palabra que salva
Que enamora
Que mata
Palabra viva que pueda reconocerse en los espejos
Palabra alucinada o loca que se enamora de los ojos de una mujer
Palabra que seduce y posee con dulce y húmeda persistencia
Palabra que no tiembla para empuñar la muerte
Palabra que arrulla a los niños y calma las angustias ancianas
Tomo la palabra para asir la vida
Para detener la muerte
Para darle forma a unos versos con pies y manos propios
Tomo la ternura
Palabra pequeña sonrisa de este día
Remanso que curas viejas heridas al nombrarlas
Palabra que me dispensas silencios
Que batalla contra mis resabios más amargos
Palabra que late y parpadea desde su piedra eterna
Palabra que echa a volar esperanzas sueños pájaros de otros mundos
Palabra
Respiración que abres la puerta a los festejos del alma
Tormenta que limpias las ciudades de los hombres
Universo en libertad
Fecundadora que das pan y apagas la sed
Revolución existencial
Temblor de dos bocas
Último regazo
Soldado invencible que embistes y transformas
Palabra que te doy sangre y carne
Ardoroso amor te doy
Eternidad en construcción te doy
Alimento para el amor te doy mientras te tallo con martillos de fuego
Palabra
Ve al camino y predica la memoria del hombre sólo por el lado de su ternura

A.F.